19. septiembre. 2006

parque O'Higgins, Santiago, Chile
El humo denso, espeso y oliente invade el ambiente, olor a carbón, ceniza y grasa seducen o repelen al que se aproxima. Detrás, algunas sombras se desplazan sin rostro claro; delante, la espera se torna un acto de veneración. La noche es el escenario para ese espectáculo ritual. La música estridente, algunos rostros desencajados por el alchol, una pareja de ancianos que lucen su mejor atuendo, un perro…y una pareja que ríe de nada y de todo...es una noche alegre...una noche de fondas.